Un referente de la educación

En el día de ayer, 19 de mayo, falleció el maestro Miguel Soler Roca (Corbera de Llobregat, 10 /04/1922 - Montevideo, 19/05/2021). El equipo del Museo Figari expresa su más sentido pésame y las condolencias a familiares y amigos.

Recordamos su grata y serena presencia en el Museo Figari, en ocasión de la presentación del libro "Pedro Figari, Tradición y Utopía" de María L. Battegazzore y Nancy Carbajal (23/09/2010). Evocamos la lucidez y calidez de su análisis, su innata rebeldía y el profundo conocimiento de la obra educativa de Figari.

Soler será siempre recordado por ser el histórico director del Núcleo Escolar Experimental de La Mina, una experiencia que entre los años 1954-1961 articuló esfuerzos entre escuelas rurales y otras instituciones públicas para integrar a las comunidades empobrecidas de esa zona fronteriza del norte de Cerro Largo, logrando mejorar sus condiciones de vida.
 
Soler, que había llegado a Uruguay de pequeño en 1926, se graduó en 1943 muy pronto desarrolló una trayectoria docente destacada y comprometida con la realidad social: dirigió la División de Alfabetización, Educación de Adultos y Desarrollo Rural de la Unesco, fue fundador de la Federación Uruguaya de Magisterio y de las misiones socio-pedagógicas antes mencionadas. Entre otros cargos importantes fue Presidente de la Comisión del Debate Educativo que sienta las bases para la Ley de educación en el Uruguay (2005-2006) y fue  nombrado Doctor Honoris causa por la Universidad de la República (2006).

Fue también un colega muy cercano y amigo de Julio Castro, educador y periodista uruguayo secuestrado por la dictadura cívico-militar el 1 de agosto de 1977 y que permaneciera como detenido desaparecido durante 34 años, hasta el 21 de octubre de 2011, cuando su cuerpo fue hallado en un enterramiento clandestino en una finca militar en Toledo. Soler no dejó nunca de bregar por la memoria y la búsqueda de la verdad de su amigo, así como por la de todos los detenidos desaparecidos.

En el año 2015 se le rindió un homenaje en la Escuela Rural No.60 de La Mina y el escultor Fernando Stevenazzi, uno de los fundadores de la Asociación de Amigos del Museo Figari, inauguró su escultura-homenaje “Experiencia en Colectivo", una mesa rectangular de metal de diez metros de largo, dos de ancho y uno de alto, con una circunferencia en uno de sus extremos por la que crece un ceibo blanco. La mesa y el árbol sintetizan el legado del maestro Soler: "Los dos elementos simbólicos que reúne la escultura refieren a valores asociados a aquella experiencia socioeducativa: la mesa es el lugar de lo común, de lo nutritivo, el espacio para el intercambio, el diálogo y el debate. El árbol es la vida, el lugar de cobijo, de abrigo. Y también es la identidad local (por ser el ceibo blanco una especie nativa), las propias raíces, el ecosistema del que se parte y sobre el que se busca actuar." (Carolina Porley, "Elogio de la acción en común", Brecha, 29 de abril de 2015).

Foto de Miguel Soler. Fuente: https://ellegadopedagogico. weebly.com/miguel-soler.html